Un carnaval "moderno"

El Carnaval de Cádiz es crítica y opinión. Eso lo afirman muchos, y se debe a lo ligado que está el COAC a nuestras fiestas típicas gaditanas. El concurso hace que el Carnaval de Cádiz sea lo que es, hoy en día. Y parece ser que ha evolucionado.

Hablábamos de nuevos estilos, nuevos ritmos o ideas y usábamos la palabra innovación. Este concurso nos aporta cultura, arte, crítica, composiciones, una creación de música y letras... una cantidad de contenido que se vuelve real gracias a la buena imaginación que se tiene en nuestra ciudad. Y deberíamos usar todo eso para lo que de verdad nos importa.
Que el Concurso sea importante, no implica que todo gire en torno a él; ni tampoco que debamos usar lo peor de nosotros para ello. De hecho, si es tan importante, deberíamos usar lo mejor de nosotros mismos.

Siempre hubo y habrá esos piques por contraste de opiniones. "Para gustos los colores" no dejará de ser una de las frases más repetidas, porque es lo que se aprecia en este concurso: variedad. Si todos los aficionados pensáramos lo mismo y nos gustasen las mismas agrupaciones, algo fallaría; no somos así. La verdad es que queremos que haya división de opiniones, pero no acotación de bandos que parezcan que están enfrentados entre sí.

Si algo hay que destacar es el respeto hacia todos que tenemos en nuestra ciudad. Fama de tolerantes y acogedores, ya que la ciudad de Cádiz ha albergado todo tipo de culturas y personas de todo el mundo. Por eso, no debemos dejarnos llevar por la envidia o el recelo de que otro sea diferente... y más si ese semejante es uno de nosotros mismos.

En 2013 el Carnaval no es como el que se recuerda años atrás, pero la gente sigue con las mismas ganas de Concurso, recién acabada la Navidad. Tantas ganas, que siempre se escapa algún chivatazo sobre algún secreto a voces del disfraz de alguna chirigota, o lo que harán algunos componentes de otra. Sin embargo, las nuevas tecnologías hacen que se desvelen tipos, ideas, músicas e incluso coplas enteras y no por "boca a boca", sino de manera masiva. Y eso no gusta.
Es una falta de respeto a los que llevan meses ensayando y esperan ansiosos su "gran día" para presentar un trabajo, que desafortunadamente el público conoce de antemano porque algún gracioso haya querido difundirlo antes. Y la gente de Cádiz sabe que esos ataques no son de falsa bandera, como alguno pudiera pensar. Por supuesto, todo esto en escala, con autores y agrupaciones más famosas, algo más grande que con las que no tanto lo son.


¿Es aquí a donde queremos llegar? ¿Es malo tener una opinión distinta a otros? Todos deberíamos estar orgullosos de la variedad de estilos e ideas que tenemos. Que haya división de opiniones, como siempre. Pero que no existan bandos acotados que parezcan que están enfrentados. Y que sí compitan, pero sólo en el concurso.

Que quede abierto el debate y la crítica, pero que sea constructiva porque si no, no es Carnaval.